El día que todo cambio para Dorith
El “día” en que todo cambió…
Hacia el final del verano del 2018, Dorith salía para su primera clase de windsurf con Darío Ghandour en la playa de Pocitos. Una voz dentro de ella decía: “¡Cuidado! Este día probablemente cambiará mi vida”. Y desde entonces, la vida de Dorith cambio para siempre.
Desde el primer momento, ella se entusiasmó por este fascinante deporte y rápidamente se hizo adicta y quería más y más… . Nos olvidábamos de mencionar que ya tenía casi 50 años en ese momento y que también tenía artrosis en la rodilla. Pero rápidamente se dio cuenta que no era imposible y aprendió de su coach Darío que todo es posible si te involucras y sólo “quieres” hacerlo.
¿Cómo inicio esa nueva aventura?
Ella inicio esa nueva aventura con un curso de 10 horas para principiantes con la tabla de escuela y la vela para principiantes de Star-fish, que ofrecen condiciones ideales para aprender. Ella logro dominar las maniobras básicas como el tack y el jibe bajo la excelente guía de Darío.
No pasó mucho tiempo hasta que ella compró su primer equipo de windsurf. Una vela Air freewave 4,5m2 junto con la tabla Eco Freeride 130 lts que fueron perfectos para su desarrollo constante y aprendizaje de la mi técnica.
STAR-FISH Center de Pocitos
Durante dos años pudo beneficiarse del excelente entrenamiento en el starfish-Center de Montevideo. Con su coach no sólo pudo mejorar constantemente su técnica en las clases individuales y grupales, sino también divertirme mucho en el agua. En numerosos talleres obtuve valiosos consejos y sugerencias sobre la seguridad en el windsurf y el manejo del equipo fuera y dentro del agua. Después de todo, el cuidado del equipo y su mantenimiento es algo muy importante afirmaba Dorith en su entrevista.
De esta manera ella logro alcanzar uno de sus sueños que era planear sobre el agua como los cracks. Después de un año fue capaz de ir a fondo con el arnés y los footstraps, también aprendió enseguida el waterstart. ¡Qué gran sensación usar el poder del viento para uno mismo y ser capaz de controlarlo! nos dijo Dorith. Pronto se dio cuenta que necesitaba más velas de diferentes tamaños para divertirse más en el agua, incluso con más o menos viento. Ahí ella se compro la vela IRON Crossover 3.7 para los días de tormenta y con la vela NOVO Freeride 5.8 para alcanzar el planeo con muy poco viento con sus 55 kgs.
En paralelo al windsurf
Durante este tiempo trabajó como profesora en el Colegio Alemán de Montevideo y ella encontró con el windsurf un excelente equilibrio para canalizar el estrés. El punto culminante fue un viaje de 10 días a Jericoacoara (Brasil) con un grupo del Starfish-Center y Darío como coach. Allí encontramos condiciones de viento ideales, que la llevo a conocer sus límites en un momento u otro, ella afirma que aprendió una cantidad increíble en ese viaje.
Cuando no hay mucho viento, se divierte mucho con las maniobras como el helitack, doble-helitack, 360°, ir al revés etc., que pueden perfectamente sustituir a un entrenamiento físico de cuerpo entero.
Mientras tanto ella esta de vuelta en Alemania, donde comenzará su nuevo trabajo en Friedrichshafen en el Lago de Constanza en unas semanas. Aunque el Lago de Constanza es todo menos un punto de viento fuerte, el Lago de Garda como hotspot conocido entre los windsurfistas no está muy lejos. Por lo cual seguirá viviendo su sueño, se compro una van y su nueva tabla Shaki 100l volume llegará en cualquier momento. En una segunda entrevista ella nos compartirá sus experiencias nuevas con su nuevo equipo y de sus viajes.
Dorith Werner, 22.07.2020.
último video en POCITOS: Dorith in action